Las Ardillas + Shannon And The Clams
Sábado 6 de octubre 2012
Siroco (Madrid)
Todo individuo que suele morar los fines de semana por el Siroco tenía dos posibilidades para este sábado. Bien podía echarse unas risas en la planta de arriba del garito, viendo actuar de gratis a los wannebes risorios de tipos como Guille Mostaza, Fran Perea y Antonio López alias "Noni", o mejor aún, podía armarse de valor, bajar unos cuantos peldaños hasta llegar al subterráneo de la sala y disfrutar del gamberrismo y desmadre que ofrecieron Las Ardillas y Shannon And the Clams con motivo de su gira europea patrocinada por Slovenly Recordings.
El directo de Las Ardillas, quinteto puertorriqueño de punk, fue una auténtica salvajada. La semblante que proyectaban sobre las tablas ya invitaba a quitarse la camiseta empapada de sudor y arrojársela a la cabeza a la primera rubia a la vista.
Gianky y los suyos le dieron un repaso a conciencia a su
LP homónimo, el cual llevaba paseándose por la red sin pena ni gloria hasta que Chacho Records decidió editarlo en 12".
Tras las fugaces interpretaciones de los temas Linda Niña y Roberta, estos majaretas empezaron a meterse al público en el bolsillo con hits como Canción de Luz, track que abre su debut, Todo Es Mierda y Nancy. Después de veinte minutos de actuación y con un par de barbudos dando vueltas como locas, aparentemente motivado por el abuso del zumo de cebada, Las Ardillas cerraron su magistral repertorio con Algún Día, uno de los mejores cortes del conjunto, y Todo Es Igual. Impecables.
Shannon And The Clams salieron al escenario con la mesa puesta y la cena servida. Sus teloneros habían dejado como herencia a un público entregado y bastante encandilado. Si en lugar de
Shannon Shaw y
Cody Blanchard hubiese subido a la tarima Milli Vanilli, el recibimiento hubiese sido igual de caluroso. El lo-fi popero de
Sleep Talk (2011. 1-2-3-4 Go!) fue el denominador común predominante durante toda su actuación. Canciones como
Sleep Talk,
Done With You,
Oh Louie y
The Warlock In The Woods fueron acogidas por gran entusiasmo por el respetable. Los estadounidenses pusieron la guinda a la noche con el excelente cover del hit de los sesenta
Runaway, obra original de Del Shannon.
